jueves, 28 de febrero de 2013

Otra vez Ratzinger


No quiero ni pensar qué habrá pasado,
ni cuánto cavilar habrá tenido,
un viejo corazón que no ha podido
seguir con lo difícil de un papado.

No sufras, al Señor todo lo has dado;
tu mente, tu sapiencia, tu sentido.
Los años son así. No lo has querido
pero tus fuerzas te han abandonado.

He pensado, quizá desde los cielos
han visto la raíz de tus anhelos
y desean oír tus peticiones.

Para mí, estás aquí; aún retirado
seguiré junto a ti, siempre a tu lado,
y te acompañaré en tus oraciones.

sábado, 23 de febrero de 2013

Tiempos de cavilar


Permítenos, Señor, que meditemos,
en los días que hoy conmemoramos,
cómo va nuestra vida; ¿recordamos
cuando dijiste tú que nos amemos?

¿Compartimos quizá lo que tenemos?
¿Sentimos de verdad lo que rezamos?
¿Las cruces, si la hay, las aceptamos?
¿Ayudamos allí donde podemos?

Tú supiste sufrir; yo, ¡qué trabajo
me cuesta superar un altibajo
aunque sea de lo más intrascendente!

En tiempo de importantes decisiones,
¿suplico por mi Iglesia? Mis acciones,
¿serán las de un cristiano consecuente?

viernes, 15 de febrero de 2013

Reflexión


Mi querido Señor, sombras y luces
en estos largos días cuando pienso,
muy afligido, en tu sufrir intenso,
sólo por mí, cargando con tus cruces.

Con tu pesar, Señor, tú me conduces
a descubrir aquí tu amor inmenso
cuando te muestras triste e indefenso,
y con ello por siempre me seduces.

Y es que un Dios que consiente su pasión
para darnos así la salvación
es, para cualquier hombre, inconcebible.

Por eso en estas horas te acompaño,
con este recordar de cada año,
para lograr contigo lo imposible.

lunes, 4 de febrero de 2013

Por entre las ramas


El sol,

buscando su camino

por entre las hojas verdes,

a veces

parece una estrella.


Conservo el recuerdo

de uno de sus

rayos

que alumbraba

la fronda,

con un redondel de luz

clavado en la

hierba,

como un lunar

vivo

en el alma del

bosque.