domingo, 28 de febrero de 2016

Expiación


Tiempo de cavilar, de concentrarse,
de mirar hacia Dios, de darse cuenta
de que hay una vida que se enfrenta
a un encuentro total, a un fin, a un darse.

Y si halla el cuerpo al alma, ¿va a encontrarse
una esencia de blanca vestimenta?,
¿un aliento profundo que presienta
el ferviente deseo de entregarse?

Hay que olvidar las dudas si, por dentro,
se espera firmemente que ese encuentro
influya en el pensar, en la conciencia.

Los días de sayal y de ceniza,
en este mundo cruel que tiraniza,
que impulsen a asumir la penitencia.


jueves, 11 de febrero de 2016

Cuaresma


Tiempo en el que despierte tu pobre alma dormida
y dolorosamente medite en el camino
que siguió por nosotros un Jesús peregrino,
ofreciendo en silencio su pasión y su vida.

Día en el que florezca la esperanza perdida
y recuerde la historia cómo asumió el destino
el que quiso ser reo, ante el que yo me inclino,
y soportó en su cuerpo herida tras herida.

Y yo, sin pensar nunca que allí fui perdonado
de toda culpa vieja, de todo mi pecado,
de todo lo que triste olvidar deseaba.

¿Qué menos que acordarme de las horas aquellas
en las que Cristo sufre al pie de las estrellas
y todo por tan sólo decirme que me amaba?