jueves, 7 de julio de 2016

Relato al Señor

Ya no quiero la historia de los años pasados,
ni una viviente escena, ni un recuerdo latente;
que el hecho acontecido se marche de mi frente,
que no tenga memoria de mis tiempos censados.

Ya todos mis anales los doy por olvidados,
con una nueva vida quiero ser consecuente,
he de mirar arriba, dejadme que lo intente,
ahora es el comienzo de mis años dorados.

Veo tanto paisaje en las altas colinas
a donde se dirigen las almas peregrinas
por un nuevo camino inundado de luces...

En la vida de ahora todo es nada y vacío;
sólo vive en los aires este cariño mío,
en los aires del cielo a donde me conduces.