Jugar con el color.
Aprisionar reflejos de arco iris,
y aventurar la sombra,
y acomodar el brillo,
y teñir el momento.
Poder parir paisajes y jardines
rodeados de verdes y de oscuros.
Dominar los matices de la flor,
el blanco del jazmín,
los grises de la tórtola y la nube,
y el hondo azul del mar.
Deslindar los plomizos horizontes
y platear, en medio de la noche,
los rayos de una luna enamorada
que juega con la cresta de una ola
que acaricia la arena.
De “Convergencias”
Academia Iberoamericana de Poesía
martes, 5 de enero de 2010
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Qué actividad... Ya solo te falta contestar los comentarios... Un beso
ResponderEliminarAhí le han dado, Conchita Belén: que un bloguero no puede dejar de contestar ni uno de los comentarios que se le hacen!
ResponderEliminarJoan
Abuelo, tienes que contestar los comentarios!! (Comentar como: CUENTA GOOGLE, y ve siguiendo los pasos!!)
ResponderEliminarpoemas preciosos,¡¡que espiritu tan maravilloso!!dios le tenga aqui muchos años...un saludo desde Alicante,JUANY
ResponderEliminarPERDON por poner a DIOS con minúscula,
ResponderEliminarha sido una equivocación, descuido...mil perdones un saludo JUANY
Gracias Juany.
ResponderEliminarLa luz del sol, lo verde de las hojas, el cielo azul y el alma, los colores, ¿qué quieres
que te dicten si no es poesía? Y una vez hecha, confeccionada con amor, ¿a dónde te dirigen? Es Dios a quien se ve al fin de todo y de todos.
Gracias por su sensibilidad.