viernes, 17 de octubre de 2014

Dios


¿A dónde iremos cuando se termine
el hálito en que estamos prisioneros?

Qué será de mi cuerpo ya lo sé,
¿pero y mi pensamiento?

Tan sólo necesito
que desde lo más alto me mire Dios;
no, no pretendo verlo,
con que Él me mire basta.

-------------------------------------

Éste fue mi primer poema místico,
hace ya tantos años...





No hay comentarios:

Publicar un comentario